Guarda un rosario bajo la almohada y verás como cambia tu vida

Guardar un Rosario debajo de la almohada, es un buen método para un buen descanso. Y si está bendecido, significa tener contigo el mayor sacramental, (además del Escapulario)

Desde que tomé esa costumbre, se me solucionan los problemas más fácilmente, y es un buen método para los que tienen insomnio, verán que amanecen con el rosario en las manos y han tenido un buen descanso!
 ¿Conoces la historia del rosario? Cuando sepas porque guardar el rosario bajo tu almohada quedaras realmente sorprendida y siempre lo harás.

Origen del Rosario

Una leyenda cuenta que un Hermano Lego (que no era sacerdote) de la Orden de los Dominicos, no sabía leer ni escribir, por lo que no podía leer los Salmos, como era la costumbre en los conventos de la época. Entonces, cuando terminaba sus labores por la noche (él era el portero, el barrendero, el hortelano, etc…) se iba a la capilla del convento y se hincaba frente a la imagen de la Virgen María , y recitaba 150 avemarías (el número de los salmos), luego se retiraba a su celda a dormir. Por la mañana, de madrugada, se levantaba antes que todos sus hermanos y se dirigía a la capilla para repetir su costumbre de saludar a la Virgen.

El Hermano Superior notaba que todos los días, cuando él llegaba a la capilla para celebrar las oraciones de la mañana con todos los monjes, había un exquisito olor a rosas recién cortadas y le dio curiosidad,por lo que preguntó a todos quién se encargaba de adornar el altar de la Virgen tan bellamente, a lo que la respuesta fue que ninguno lo hacía, y los rosales del jardín no se notaban faltos de sus flores.

El Hermano lego enfermó de gravedad; los demás monjes notaron que el altar de la Virgen no tenía las rosas acostumbradas, y dedujeron que era el Hermano quien ponía las rosas. ¿Pero cómo? Nadie le había visto  jamás salir del convento, ni tampoco sabían que comprara las bellas rosas. Una mañana les extrañó que el se había levantado, pero no lo hallaban por ninguna parte. Al fin, se reunieron en la capilla, y cada monje que entraba se asombraba, pues el hermano lego estaba arrodillado frente a la imagen de la Virgen, recitando extasiado sus avemarías, y a cada una que dirigía a la Señora, una rosa aparecía en los floreros. Así al terminar sus 150 saludos, cayó muerto a los pies de la Virgen.

Con el correr de los años, Santo Domingo de Guzmán, por revelación de la Santísima Virgen, dividió las 150 avemarías en tres grupos de 50, y los asoció a la meditación de la Biblia: Los Misterios Gozosos, los  Dolorosos y los  Gloriosos, a los cuales el Papa Juan Pablo II le añadió los Misterios Luminosos.

LLEVEN SU ROSARIO TODOS LOS DIAS

  • Cuando portas tu Rosario, Satanás se aleja, y cuando lo rezas, el mal no tiene el triunfo sobre ti.
  • Tu sabias que cuando trates de re-enviar este mensaje, Satanás va a intentar desanimarte?

¡Re-enviando este mensaje, colaboras para acelerar el triunfo de la Virgen Maria!

Envíalo a tus amigos y familiares  y juntos  trabajaremos por el bien, unidos al poder del Espíritu Santo y bajo la protección de nuestra madre del Cielo!!🙏🏻

DESCUBRE TU FUTURO PARA LOS PROXIMOS DIAS